Parece que ya no queda negocio de venta que se le resista a Internet, pero el auge de las farmacias online está siendo increíble y no deja de crecer. La medicina se ha revolucionado al permitirse acceso a estos productos a personas de movilidad reducida.
A simple vista, sería fácil imaginar la reticencia de la gente de a pie a acudir a este tipo de plataformas cuando visitar la farmacia del barrio es algo tan asentado en nuestra sociedad. Pero nada más lejos de la realidad. Lo que sucede es que comprar productos a través de las
farmacias online es algo repleto de ventajas, no sólo por la amplia
gama de artículos, sino por la posibilidad de contratar entre los
diferentes precios existentes en el mercado.
Se estima que más del
7% de los establecimientos farmacéuticos de España tienen presencia en Internet, valiéndose así de la gran ventaja de ser plataformas abiertas 24 horas para el usuario. La posibilidad de no tener que moverse de casa para recibir sus medicamentes es toda una
mejora de la calidad de vida para algunos pacientes que tienen una capacidad de movilidad reducida.
El
ahorro tanto de dinero como de tiempo son dos avances con respecto a los locales farmacéuticos habituales. En estas plataformas se puede encontrar toda la
información necesaria acerca de lo que se quiere comprar, como lo que concierne a la
calidad del producto, que siempre han superado un previo control sanitario y están sujetos a la más estricta legalidad y profesionalidad. Puesto que, después de todo, detrás de estos negocios online hay una farmacia física y un licenciado en farmacia que avala estos productos.
La
amplia oferta de sus catálogos no se puede comparar a la de las tiendas físicas, siempre más limitadas, ya que sólo dispondrán de un limitado número de productos en comparación. El claro ejemplo es
FarmaciaMarket, una plataforma gestionada por farmacéuticos y profesionales sanitarios experimentados que cuenta con una gran oferta repleta de
marcas líderes y de primera línea.
Por no hablar de la
facilidad de acceder a cualquier tipo de producto, por especializado y concreto que sea, ya que cada paciente puede tener unas necesidades muy determinadas que no puedan ser cubiertas en las farmacias habituales. Por supuesto, otra gran ventaja es la posibilidad del usuario de valerse de la
privacidad y el
anonimato que estos servicios le brindan. Pues, en ocasiones, ese cara a cara al que se ven sometidos al acudir a farmacias físicas es una fuente de frustración para el paciente.
Las productos son
más baratos que en las farmacias convencionales y, además, el usuario puede comparar los precios de los mismos sin ningún esfuerzo, pudiendo así decidir la opción que mejor se ajuste a sus necesidades. Siguiendo en esta línea, el paciente también tiene la oportunidad de beneficiarse de las posibles ofertas y
promociones que se realicen fruto del
amplio stock del que disponen.